Protect our Physicians
Proteger a nuestros médicos

Protect our Physicians
By Latoya Joyner
June 30th marked the one-year anniversary of a fatal shooting at Bronx-Lebanon Hospital in my district. One patient and multiple physicians were shot. A physician, Dr. Tracy Tam, was killed.
Dr. Tam should not even have been working at Bronx Lebanon that Friday in late June of 2017.
She was actually covering a shift for another colleague. My heart goes out to Dr. Tam’s family, her colleagues and to the others who were wounded that day.
This incident is a painful reminder that we must do more to ensure that all of our healthcare workers – including physicians – have a safe and secure work environment. We must do everything in our power to protect these professionals, who have dedicated their lives to improving the health and well-being of others.

That is why I have joined with my Senate colleague, Rich Funke from Rochester, to introduce legislation to make it clear that physicians are among the medical professionals who are protected under our penal law. Current law has strong protections for assaults against registered nurses, LPNs, paramedics, public health sanitarians and several other workers – but it does not include doctors.
It must.
Our legislation, the Physician Protection Act, would address this glaring omission. It would make it clear in the law that licensed physicians are given the same level of protection as other healthcare professionals while also ensuring that those providing direct patient care are covered in all practice settings.
According to the Bureau of Labor Statistics, 74 percent of all non-fatal assaults that happen within the workplace involve healthcare workers. Studies cited in a 2016 New England Journal of Medicine (NEJM) article on workplace violence found that 78 percent of emergency physicians have reported being targets of workplace violence in the prior year with 21 percent being physical assaults. One third of pediatric residents reported being assaulted during their training.
The 2016 NEJM article also found high rates of abuse toward family physicians, primarily by patients displaying narcotic-seeking behavior. While physicians work to help those suffering from drug addictions, they should not be harmed trying to do so.

I recently held a press conference in Albany with Senator Funke, a number of medical associations including the State Academy of Family Physicians, and an Albany-based physician who was the victim of an assault in his practice two years ago.
The physician, Dr. Christopher Gabriels described how on an otherwise quiet day a man walked into his office, pulled out a gun and assaulted Dr. Gabriels and his father, another practicing physician. Dr. Gabriels was able to fight back and the man ran away. However, based on what the man left behind in a bag, the
doctors believe he intended to seriously harm and rob them, or worse. As Dr. Gabriels said at the news conference, this violent assault has changed the way he practices medicine.
Sadly, there are stories like Dr. Gabriels and Dr. Tam that have been repeated across the state. And we know that hospitals, clinics and physician offices are instituting new policies and procedures to increase security and readiness like practice drills, improved communications and other measures.

However, many offices do not have the financial means to hire security guards, install security systems or retrofit physical space. Instead, it is incumbent on the state to extend the same protections in law that we have in place for other healthcare professionals to physicians.
This is critical both to serve as a deterrent and also to demonstrate to physicians that we value their service. In my community, we face severe shortages of physicians in primary care and other specialties. We do not want a lack of safety and security to serve as another barrier to physicians practicing in our neighborhoods, both urban and rural.
Finally, right now the law spells out specific settings like hospitals, nursing homes and hospital emergency or surgery centers where those providing direct patient care are protected. With more and more care being provided on an outpatient basis in clinics, private offices and other ambulatory care settings, we must be sure that healthcare workers providing direct patient care are covered under the law, regardless of where they are providing such care.
These are loopholes in our law that must be closed so that those who devote their careers to the care of others receive the protections they so richly deserve. I am so proud of these local heroes who call New York home.
I am looking forward to passing the Physician Protection Act this session so no physician is left less protected than their healthcare worker counterparts.
Latoya Joyner represents the 77th Assembly District in the New York State Assembly, which includes the Claremont, Concourse, Highbridge, Mount Eden and Morris Heights sections of The Bronx.
Proteger a nuestros médicos
Por Latoya Joyner
El 30 de junio se celebró el primer aniversario de un tiroteo fatal en el hospital Bronx-Lebanon en mi distrito.
Un paciente y múltiples médicos recibieron disparos. Una médica, la Dra. Tracy Tam, fue asesinada.
La Dra. Tam ni siquiera debería haber trabajado en Bronx Lebanon ese viernes a fines de junio de 2017.
En realidad estaba cubriendo un turno para otro colega. Mi corazón está con la familia de la Dra. Tam, sus colegas y con las otras personas que fueron heridas ese día.
Este incidente es un doloroso recordatorio de que debemos hacer más para garantizar que todos nuestros trabajadores de la salud, incluidos los médicos, tengan un entorno de trabajo seguro y protegido. Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para proteger a estos profesionales, que han dedicado sus vidas a mejorar la salud y el bienestar de los demás.

Es por eso que me he unido a mi colega del Senado, Rich Funke, de Rochester, para presentar una legislación para dejar en claro que los médicos se encuentran entre los profesionales médicos que están protegidos por nuestra ley penal. La ley actual tiene fuertes protecciones para los asaltos contra enfermeras registradas, enfermeras practicantes, paramédicos, sanitarios de salud pública y varios otros trabajadores, pero no incluye a los médicos.
Debería.
Nuestra legislación, la Ley de Protección Médica, abordaría esta flagrante omisión. Dejaría en claro en la ley que a los médicos con licencia se les brinda el mismo nivel de protección que a otros profesionales de la salud y, al mismo tiempo, garantizaría que los que brindan atención directa a los pacientes estén cubiertos en todos los entornos de práctica.
De acuerdo con la Oficina de Estadísticas Laborales, el 74 por ciento de todos los ataques no fatales que ocurren en el lugar de trabajo involucran a trabajadores de la salud. Estudios citados en un artículo de 2016 del New England Journal of Medicine (NEJM) sobre violencia en el lugar de trabajo, encontró que el 78 por ciento de los médicos de emergencias informaron haber sido víctimas de violencia en el lugar de trabajo en el año anterior, y el 21 por ciento fueron agresiones físicas. Un tercio de los residentes pediátricos informaron haber sido agredidos durante su entrenamiento.

apoya la legislación.
El artículo del 2016 del NEJM también encontró altas tasas de abuso hacia los médicos de familia, principalmente por pacientes que muestran un comportamiento de búsqueda de narcóticos. Si bien los médicos trabajan para ayudar a las personas que padecen adicción a las drogas, no deberían ser lastimados al intentar hacerlo.
Hace poco celebré una conferencia de prensa en Albany con el senador Funke, varias asociaciones médicas, incluida la Academia Estatal de Médicos de Familia, y un médico de Albany que fue víctima de un ataque en su consultorio hace dos años.
El médico, el Dr. Christopher Gabriels, describió cómo, en un día por demás tranquilo, un hombre entró en su oficina, sacó un arma y agredió al Dr. Gabriels y a su padre, otro médico practicante. El Dr. Gabriels pudo defenderse y el hombre escapó. Sin embargo, con base en lo que dejó el hombre en una bolsa, los médicos creen que tenía la intención de dañarlos gravemente y robarles, o peor. Como dijo el Dr. Gabriels en la conferencia de prensa, este asalto violento ha cambiado la forma en que practica la medicina.
Lamentablemente, hay historias como la del Dr. Gabriels y la Dra. Tam que se han repetido en todo el estado. Y sabemos que los hospitales, las clínicas y los consultorios médicos están instituyendo nuevas políticas y procedimientos para aumentar la seguridad y la preparación, como práctica de simulacros, comunicaciones mejoradas y otras medidas.

Sin embargo, muchas oficinas no tienen los medios financieros para contratar guardias de seguridad, instalar sistemas de seguridad o adaptar el espacio físico. En cambio, corresponde al estado extender las mismas protecciones en la ley que tenemos establecidas para otros profesionales de la salud a los médicos.
Esto es fundamental tanto para servir como un elemento de disuasión y también para demostrar a los médicos que valoramos su servicio. En mi comunidad, enfrentamos una grave escasez de médicos en atención primaria y otras especialidades. No queremos una falta de seguridad que sirva como otra barrera para los médicos que ejercen en nuestros vecindarios, tanto urbanos como rurales.
Finalmente, en este momento, la ley detalla entornos específicos, como hospitales, asilos de ancianos y salas de emergencia de hospitales o centros de cirugía donde están protegidos quienes proporcionan atención directa a los pacientes. Con más y más cuidados proporcionados de forma ambulatoria en clínicas, consultorios privados y otros entornos de atención sin cita, debemos asegurarnos de que los trabajadores de la salud que brindan atención directa a los pacientes estén cubiertos por la ley, independientemente de dónde estén brindando dicha atención.
Estas son lagunas en nuestra ley que deben cerrarse para que quienes dedican sus carreras al cuidado de otros reciban las protecciones que merecen. Estoy muy orgulloso de estos héroes locales que llaman hogar a Nueva York.

Anhelo la aprobación de la Ley de Protección Médica en esta sesión para que ningún médico quede menos protegido que sus contrapartes trabajadores de la salud.
Latoya Joyner representa al distrito 77 en la Asamblea del Estado de Nueva York, que incluye las secciones de Claremont, Concourse, Highbridge, Mount Eden y Morris Heights del Bronx.