Predators in public
Depredadores en público

Lawmakers seek to expel sex offenders from NYCHA sites Rafael González recently became a foster parent. He is facing concerns, however, beyond questions on how to best establish curfews or how to find the right after school activities. Of late, the Sedgwick Houses resident has become concerned about a far more pressing issue: the presence of sexual predators within his housing development. A recent report issued by State Senator Jeff Klein and Councilmember Ritchie Torres found many registered sex offenders call New York City Housing Authority (NYCHA) developments home – despite a federal law prohibiting them from residing in public housing. The report revealed 110 sex offenders residing in 81 different NYCHA sites across the five boroughs. And of the 110 sex offenders who reported a NYCHA address to the Department of Criminal Justice Services (DCJS), 30 of them reside in Bronx public housing sites, including the Edenwald, Jackson, Bronx River and Sedgwick housing developments. González said he was fearful for the safety of children in his development. “I can’t believe that we have predators living in the building,” he remarked. “[As a parent,] I don’t want to be worrying about who my neighbor is.” In Manhattan, four sex offenders are residing in East Harlem’s Jefferson Houses, said the report, marking the highest concentration of offenders in any one development. Klein said the number of offenders living in NYCHA buildings had jumped from 74 in 2010. “NYCHA has absolutely no excuse,” stated Klein. “It’s a breakdown in the screening process, it’s a breakdown in management.” According to the report, 41 of the offenders were considered sexually violent by the DCJS, and four had committed crimes against children under the age of five. Torres offered a blunt personal assessment of those arrested for sex crimes. “I believe public housing is a benefit that should go to those who need or deserve it,” Torres said. “It should not be going towards sex offenders, whom I regard as the scum of the earth.” Klein and Torres, who were joined by Councilmembers Mark Treyger and Antonio Reynoso for a December 15 press conference, slammed NYCHA for allowing the number of offenders to increase 67 percent since a similar Klein investigation in 2010. “What did NYCHA do in those intervening years?” questioned Torres. “We have no evidence at all that NYCHA is even tracking – much less removing – sex offenders from public housing.” In 2010, Klein passed legislation that requires DCJS to provide NYCHA with data on sex offenders, who are required by law to self-report their address of residence. “We are sending that list, with the names, the addresses of NYCHA residents that are sexual predators,” said Klein. The lawmakers have also proposed a two-step plan to remove the predators from public housing. First, they called on NYCHA and NYPD to conduct a survey to cross-check the sex offender registry with NYCHA housing. Any apartments with sex offenders should be immediately inspected in order to exclude offenders currently in residence. And the two argue that the federal agency HUD should identify those residents who are legally living in NYCHA’s apartments with illegally residing sex offenders, in order to determine if any fraud was committed in failing to list them as a household member. In response, NYCHA questioned the reliability of the report’s data and suggested that the method of self-reporting addresses is riddled with inaccuracies. “The Klein report is not credible as the data has not been verified,” commented a NYCHA spokesperson, who said the agency determined that more than half of the cases flagged in Klein’s 2010 investigation were not actually residing at NYCHA addresses. The agency also claimed it had not been provided with all data needed to track and remove offenders from its public housing stock. “NYCHA has requested addresses on sex offenders from the State Division of Criminal Justice Services as required by state law, but has not been given access to that information,” the spokesperson said. But González, who also serves a member of the development’s tenant’s association, insisted that more needed to be done – and that the agency should have made certain to engage residents directly. “We should have been informed,” he argued. “We have a lot of kids here and a lot of young mothers. Kids hang out outside by themselves. It saddens me that this is happening here.” For more on the report, please visit www.manhattantimesnews.com. For more on the report, please visit www.thebronxfreepress.com.
Legisladores tratan de expulsar a los delincuentes sexuales de sitios de NYCHA Rafael González recientemente se convirtió en un padre adoptivo. Tiene preocupaciones, sin embargo, más allá de las preguntas sobre cómo establecer mejor los toques de queda o cómo encontrar las actividades correctas para después de la escuela. Últimamente el residente de las Casas Sedgwick se encuentra preocupado por un problema más acuciante: la presencia de depredadores sexuales dentro de su desarrollo de vivienda. Un reciente informe emitido por el senador estatal Jeff Klein y el concejal Ritchie Torres encontró que muchos delincuentes sexuales registrados llaman a los desarrollos de la Autoridad de Vivienda de la ciudad de Nueva York (NYCHA por sus siglas en inglés) su hogar, a pesar de que una ley federal les prohíbe residir en viviendas públicas. El informe reveló que 110 delincuentes sexuales residen en 81 sitios diferentes de NYCHA en los cinco condados. Y de los 110 delincuentes sexuales que reportaron una dirección de NYCHA al Departamento de Servicios de Justicia Criminal (DCJS por sus siglas en inglés), 30 de ellos residen en sitios de vivienda pública del Bronx, incluyendo los desarrollos de vivienda Edenwald, Jackson, Bronx River y Sedgwick. González dijo que temía por la seguridad de los niños en su desarrollo de vivienda. “No puedo creer que tenemos depredadores viviendo en el edificio”, remarcó. “[Como padre] No quiero estar preocupándome por quién es mi vecino”. Según el informe, en Manhattan residen cuatro delincuentes sexuales en las Casas Jefferson de East Harlem, marcando la mayor concentración de criminales en cualquier desarrollo. Klein dijo que el número de delincuentes viviendo en los edificios de NYCHA saltó de 74 en 2010. “NYCHA no tiene absolutamente ninguna excusa”, afirmó Klein. “Es un fallo en el proceso de selección, es un fallo en la administración”. Según el informe, 41 de los criminales fueron considerados sexualmente violentos por el DCJS y cuatro cometieron delitos contra niños menores de cinco años. Torres ofreció una evaluación personal directa de los detenidos por delitos sexuales. Klein y Torres, a quienes se les unieron los concejales Mark Treyger y Antonio Reynoso para una conferencia de prensa el 15 de diciembre, criticaron ferozmente a NYCHA por permitir que el número de delincuentes aumentara 67 por ciento desde una investigación similar que Klein realizó en 2010. “¿Qué hizo NYCHA en esos años intermedios?” cuestionó Torres. “No tenemos ninguna evidencia de que NYCHA esté siquiera rastreando -y mucho menos sacando- a los delincuentes sexuales de las viviendas públicas”. En 2010, Klein aprobó una ley que requiere que el DCJS proporcione a NYCHA los datos sobre los delincuentes sexuales, quienes están obligados por ley a auto informar su residencia. “Estamos enviando esa lista, con los nombres y las direcciones de los residentes de NYCHA que son depredadores sexuales”, dijo Klein. Los legisladores también han propuesto un plan de dos pasos para sacar a los depredadores de la vivienda pública. En respuesta, NYCHA cuestionó la fiabilidad de los datos del informe, y sugirió que el método de auto informar las direcciones está plagado de imprecisiones. “El informe Klein no es creíble ya que la información no ha sido verificada”, comentó un portavoz de NYCHA, quien dijo que la agencia determinó que más de la mitad de los casos marcados en 2010 por la investigación de Klein en realidad no residían en las direcciones de NYCHA. La agencia también dijo que no se le habían proporcionado todos los datos necesarios para rastrear y eliminar a los criminales de su vivienda pública. Pero González, quien también es miembro de la asociación de inquilinos del desarrollo, insistió en que se necesita hacer más, y que la agencia debió haberse asegurado de involucrar directamente a los residentes. “Debimos de haber sido informados”, argumentó. “Tenemos muchos chicos aquí y muchas madres jóvenes. Los niños pasan el rato afuera solos. Me entristece que esto esté sucediendo aquí”. Para más sobre el informe, por favor visite www.manhattantimesnews.com. Para más sobre el informe, por favor visite www.thebronxfreepress.com.
Predators in public
Story and photos by Gregg McQueen
Depredadores en público
Historia y fotos por Gregg McQueen
“Creo que la vivienda pública es un beneficio que debe ir a aquellos que necesitan o lo merecen”, dijo Torres. “No debería ir hacia los delincuentes sexuales, a quienes yo considero como la escoria de la tierra”.En primer lugar, hicieron un llamado a NYCHA y el NYPD para llevar a cabo una encuesta para cotejar el registro de delincuentes sexuales con la vivienda de NYCHA. Cualquier apartamento con delincuentes sexuales debe ser inspeccionado inmediatamente con el fin de excluir a criminales que actualmente residen ahí. Y los dos sostienen que la agencia federal HUD debe identificar a aquellos residentes que están viviendo ilegalmente en apartamentos de NYCHA con delincuentes sexuales que residen ilegalmente, con el fin de determinar si algún fraude se cometió al no incluirlos como miembros del hogar.
“NYCHA ha solicitado direcciones sobre los delincuentes sexuales a la División de Servicios de Justicia Criminal como lo requiere la ley estatal, pero no se le ha dado acceso a esa información”, dijo el vocero.