Klein looks to KO K2 Klein busca acabar con el K2

Klein looks to KO K2
Story and photos by Gregg McQueen

Concerned that the Bronx is “becoming the K2 capital of New York City,” State Senator Jeff Klein has introduced new legislation to strengthen criminal and civil penalties for the sale of synthetic marijuana.
The crackdown is meant to curtail the spread of K2, also commonly known as “Spice,” which is sprayed with chemical additives to produce mind-altering effects, and has resulted in nearly 700 emergency room visits at three Bronx hospitals in recent months, according to Klein.
Joined by Assemblymember Mark Gjonaj, health officials and community leaders, Klein announced the legislation outside of Jacobi Hospital on August 12.
“Synthetic marijuana has devastating effects on people,” stated Klein. “It causes epileptic seizures. It causes all types of erratic behavior, personality behavior disorders, and it’s extremely dangerous.”
In 2012, Governor Andrew Cuomo issued new regulations under the state’s Department of Health code to prohibit the possession, manufacture or sale of synthetic cannabinoids.

However, there is currently no criminal law on the books, and possessing or selling synthetic marijuana is simply a health code violation.
“It’s not part of the penal code,” said Klein.
Modest fines associated with Cuomo’s ban have done little to deter shop owners from peddling the drugs.
“The ban isn’t enough,” stated Klein, who explained that his legislation would give more teeth to the effort to stop K2, which has become easily obtainable at some bodegas and liquor stores in the city, and increasingly popular among young people.
“When I talk to law enforcement about this, they’ve told me that they don’t have the tools they need to prevent these sales,” explained Klein. “We need to give them those tools.”
Klein’s legislation provides five degrees of criminal sale, ranging from class “B” misdemeanor to a class “C” felony, punishable by up to five years in prison.
Klein also wants to sock store owners who sell K2 with a $2,000 fine for a first offense, $5,000 fine for a second offense and loss of licensing for a third offense.

“You sell it three times, you lose your beer license, your cigarette license, as well as your lottery license,” said Klein. “That will send a clear message that business owners should not sell this illicit substance. Three strikes, you’re out.”
Klein also called for funding to equip local law enforcement with street test kits that would better detect the presence of synthetic cannabinoids sold over the counter at local stores, as K2 chemists are routinely tweaking their formulas to subvert existing laws.
Gjonaj said that those who purchase synthetic drugs are often unaware of the dangers, and frequently mistake them as being safer than other street drugs.
“People believe that synthetic drugs are safe, and they’re marketed to our children, who believe that they are safe,” said Gjonaj.
“The biggest misconception about synthetic marijuana is that it is anything like actual cannabis,” commented Dr. Benjamin Raatjes, Director of the Psychiatric Emergency Program at Jacobi Hospital. These are dangerous chemicals sprayed onto plant matter that can be overwhelming to those using these drugs.”

Jacobi Hospital’s psychiatric emergency room currently admits 40 to 60 patients a month with sickness from smoking K2, said Raatjes, with additional patients coming through the hospital’s standard emergency room.
“Smoking synthetic marijuana makes people extremely agitated and paranoid, and they can act very violently,” explained Raatjes. “And it puts people at a greater risk of heart attack or seizure.”
Raatjes said the majority of Jacobi’s K2 patients are young men between the ages of 18 and 35.
“We see that people who use the drug a lot tend to get much sicker from it over time,” said Raatjes.
Senator Klein’s office outed 24 Bronx stores that have reportedly been selling K2 to the community, a list Klein said was compiled through an internal investigation.
Klein said that members of his staff had been able to purchase K2 at two stores — identified as EZ-Pass Gourmet Deli at 688 East 187th Street and Hairth Deli Grocery Corp. at 1570 White Plains Road — a few days before his press conference.

Officials played a video of one of the undercover K2 purchases, which showed a Klein agent buying a bag for just $5.
Also displayed was a collection of K2 packets confiscated from local stores, all of which featured colorful and cartoonish graphics and that seemed to be designed to appeal to young people.
Joe Thompson, President of the 49th Precinct Council, said the fight against synthetic drug sales should involve everyday New Yorkers, not just law enforcement.
“I call upon the mothers and fathers of the Bronx to go to these grocery and liquor stores,” he said. “Tell them to stop selling this stuff.”
Klein busca acabar con el K2
Historia y fotos por Gregg McQueen

Preocupado de que el Bronx “se está convirtiendo en la capital K2 de la ciudad de Nueva York”, el Senador Estatal Jeff Klein ha introducido una nueva legislación para fortalecer las penalidades criminales y civiles por la venta de marihuana sintética.
Las medidas están destinadas a reducir la propagación del K2, también conocido como “spice”, el cual es rociado con aditivos químicos para producir efectos de alteración mental, y ha resultado en casi 700 visitas a salas de emergencias en los hospitales del Bronx en recientes meses, según Klein.
Junto al miembro de la Asamblea Mark Gjonaj, oficiales de la salud y líderes comunales, Klein anunció la legislación en las afueras del Hospital Jacobi el 12 de agosto.
“La marihuana sintética tiene efectos devastadores en las personas”, señaló Klein. “Causa ataques epilépticos. Causa todo tipo de comportamiento errático, desórdenes de comportamiento de la personalidad y es extremadamente peligrosa”.
En el 2012, el Gobernador Andrew Cuomo emitió nuevas regulaciones bajo el código del Departamento de Salud del estado para prohibir la posesión, manufactura o venta de ‘cannabinoids’ sintéticos.

Sin embargo, actualmente no hay una ley criminal en los libros, y poseer o vender marihuana sintética es sencillamente una violación al código de salud.
“No es parte del código penal”, dijo Klein.
Modestas multas asociadas con la prohibición de Cuomo han hecho muy poco para disuadir a los dueños de tiendas de vender la droga.
“La prohibición no es suficiente”, señaló Klein, quien explicó que su legislación le dará más fuerza al esfuerzo en detener el K2, el cual ha pasado a ser fácilmente obtenido en algunas bodegas y tiendas de licor en la ciudad, y cada vez más popular entre los jóvenes.
“Cuando hablo con la policía acerca de esto, me dicen que no tienen las herramientas que necesitan para evitar estas ventas”, explicó Klein. “Tenemos que darles esas herramientas”.
La legislación de Klein provee cinco grados de venta criminal, fluctuando desde clase “B” delito menor a una clase “C” delito, con una pena de hasta cinco años de prisión.
Klein también quiere pegarle a los dueños de tiendas que vendan K2 con una multa de $2,000 por primera ofensa, $5,000 por una segunda y la pérdida de licencia por una tercera ofensa.

“La vendes tres veces, pierdes la licencia de cerveza, la licencia de cigarrillos como también la licencia de lotería”, dijo Klein. “Eso enviará un claro mensaje que los dueños de negocios no deben de vender esta substancia ilícita. Tres veces y estas fuera”.
Klein también pidió fondos para equipar a los policías locales con equipos de prueba que detectarían mejor la presencia de ‘cannabinoids’ sintético vendido en el mostrador de tiendas locales, ya que los químicos de K2 están rutinariamente buscando sus fórmulas para subvertir las leyes existentes.
Gjonaj dijo que aquellos que compran drogas sintéticas a menudo no están concientes de los peligros y frecuentemente los confunden como más segura que otras drogas en las calles.
“La gente cree que las drogas sintéticas son seguras, y están dirigidas a nuestros niños, que piensan que están seguros”, dijo Gjonaj.
“La idea más falsa sobre la marihuana sintética consiste en que no es nada como los verdaderos ‘cannabis’,” comentó el Dr. Benjamin Raatjes, director del Programa de Emergencia Siquiátrica en el Hospital Jacobi. “Hay peligrosos químicos rociados en la planta que pueden ser abrumadores para aquellos utilizando estas drogas”.

La sala de emergencias siquiátricas del Hospital Jacobi actualmente admite de 40 a 60 pacientes al mes con enfermedades por fumar K1, dijo Raatjes, con pacientes adicionales que vienen de la sala de emergencias regular del hospital.
“El fumar marihuana sintética hace a las personas extremadamente agitadas y paranoicas, y pueden actuar bien violentamente”, explicó Raatjes. “Y pone a la gente en gran riesgo de un ataque al corazón o convulsiones”.
Raatjes dijo que la mayoría de los pacientes de K2 del hospital son hombres jóvenes entre las edades de 18 a 25.
“Vemos que las personas que utilizan mucho la droga tienden a enfermarse más con el tiempo”, dijo Raatjes.
La oficina del Senador Klein descubrió 24 tiendas en el Bronx que han sido reportadas vendiendo K2 a la comunidad, una lista que dijo Klein había sido recopilada a través de una investigación interna.
Klein dijo que miembros de su oficina ha podido comprar K2 en dos tiendas – identificadas como EZ-Pass Gourmet Deli en el 688 Este en la Calle 187 y Hairth Deli Grocery Corp. en el 1570 en White Plains Road – algunos días antes de su conferencia de prensa.

Los oficiales pasaron un video de una de las ventas encubiertas de K2, el cual muestra un agente de Klein comprando una bolsa por $5.
También presentado lo fue una colección de paquetes de K2 confiscados en tiendas locales, los cuales todos presentaban coloridas y animadas gráficas, y eso parece ser diseñado para atraer a los jóvenes.
Joe Thompson, presidente del Concejo del Precinto 49, dijo que la lucha contra la venta de la droga sintética debería de envolver a todos los neoyorquinos, no solo la policía.
“Hago un llamado a las madres y padres del Bronx que vayan a las tiendas de alimentos y licores y les digan que paren de vender esa cosa”, dijo.