
How to Have a Healthy Baby
Preventing and Minimalizing Birth Defects
By B.K. Rajegowda, M.D.

Every parent’s natural wish is to have a healthy baby. But unfortunately, it doesn’t always happen.
Approximately 120,000 babies in the United States are born with defects each year, according to the National Birth Defects Prevention Network, an organization that promotes awareness and outreach. Birth defects can affect any family regardless of ethnicity, country of origin, health or financial status. In fact, birth defects are not unique to the United States. They account for major morbidity and mortality in newborns and in early infancy around the world.
But there’s good news! Modern science now makes it easier for parents to identify, prevent and minimize birth defects, even before a pregnancy has begun.
Birth defects are structural abnormalities in the baby and can include defects to the body, eye, ears, limbs or any organ. These defects can be external or internal. Major abnormalities threaten the life of the baby, while minor abnormalities can be minimized through timely diagnosis and comprehensive healthcare.
The first step toward having a healthy baby is to plan for pregnancy. It is strongly advised that women see their doctor for pre-pregnancy counseling so that their medical condition and genetic history can be evaluated. This will help identify any issues that might impact the outcome of pregnancy early on. If any problems are detected, women can get counseling, support and advice on lifestyle and healthcare choices that would put them on-track to having a healthy baby.
Child-bearing women and those who desire to have children are also advised to take vitamins that contain Folic Acid to prevent brain anomalies in the baby. Keeping a proper diet and exercise, such as Yoga and Lamaze classes, are highly recommended. In addition, quitting smoking and eliminating the use of alcohol, heavy coffee, tranquilizers and non-prescription drugs are the must-dos of a healthy pregnancy. Even over-the-counter pain-killers, when not prescribed, can adversely affect the fetus in the uterus and the infant when born.
A 10-year study, recently conducted at Lincoln Medical Center in the Bronx, discovered that two-thirds of birth defect cases can be identified within the first and second trimesters of pregnancy. Therefore, it is important for pregnant women to see their doctor for genetic disease screening, so the doctor can identify any medical condition that might affect the growing fetus during the early stage of pregnancy.
If needed, additional screenings and evaluations of the fetus, using ultrasound and echocardiogram, will follow in the second trimester. Once the baby is born, further testing is conducted including mandatory screening for 45 congenital diseases that cannot be detected by doctors. Among these disorders are HIV, thyroid, hearing problems and other congenital metabolic disorders which are tested at State laboratories in Albany. The results are generally available within 10 days.
In order for the medical and technological advances discussed in this article to properly work, parents must talk to their doctors and identify any real or potential birth defects before it is too late. Lincoln Medical Center has an exceptional prenatal, inter and intra-partum, and postnatal care team that is prepared to support babies and families.
For more information about pre-pregnancy counseling and prenatal care services at Lincoln Medical Center and other HHC facilities citywide, visit www.nychhc.org or call 311.
Dr. B.K. Rajegowda, M.D., is Director of Neonatology Services at Lincoln Medical Center, and Professor of Clinical Pediatrics at Cornell University.
Cómo tener un bebé saludable
Prevención y Reducción de los Defectos de Nacimiento
Por B.K. Rajegowda, M. D.

El deseo natural de todo padre es tener un bebé saludable. Pero, desafortunadamente, no siempre sucede.
Aproximadamente 120,000 bebés en Estados Unidos nacen con defectos cada año, según la Red Nacional de Prevención de los Defectos de Nacimiento, una organización que promueve la educación y el alcance comunitario. Los defectos de nacimiento pueden afectar a cualquier familia, independientemente de su raza, país de origen, situación de salud o estado financiero. Los defectos de nacimiento representan la mayor morbilidad y mortalidad en los recién nacidos y durante la primera etapa de la infancia, a nivel mundial.
¡Pero hay buenas noticias! La ciencia moderna hace que sea más fácil para los padres identificar, prevenir y minimizar los defectos de nacimiento, incluso antes de que haya comenzado un embarazo.
Los defectos de nacimiento son anomalías estructurales en el bebé y pueden incluir defectos en el cuerpo, ojos, orejas, extremidades o cualquier órgano. Estos defectos pueden ser externos o internos. Las anomalías “mayores” son las que amenazan la vida del bebé, mientras que las “menores” pueden ser minimizadas mediante el diagnóstico temprano y la atención médica.
El primer paso para tener un bebé saludable es planificar para el embarazo. Se recomienda que las mujeres vean a su médico para obtener consejería pre-embarazo y una evaluación de su condición médica e historial genético. Esto ayudará a identificar temprano cualquier problema que podría afectar el resultado del embarazo. Si se detecta algún problema, las mujeres pueden obtener apoyo y consejería sobre sus opciones de salud y estilo de vida, para encaminarse a tener un bebé saludable.
Se recomienda a las mujeres embarazas o que desean tener hijos, tomar vitaminas que contengan ácido fólico para prevenir anomalías cerebrales en el bebé. Además se recomienda mantener una dieta adecuada y hacer ejercicios como clases de yoga y Lamaze. Asimismo, deben dejar de fumar y eliminar el consumo de alcohol, café fuerte, tranquilizantes, drogas y medicamentos que no son recetados. Incluso, los analgésicos para aliviar el dolor que venden en las farmacias, pueden afectar negativamente al feto en el útero y al bebé cuando nace, si no son recetados.
Un estudio de 10 años realizado recientemente en el Hospital Lincoln de El Bronx, descubrió que dos tercios de los casos de defectos de nacimiento, pueden ser identificados durante el primer y segundo trimestres del embarazo. Por ende es importante que las mujeres embarazadas acudan a su médico para una prueba de detección de enfermedades genéticas, para que el doctor pueda identificar cualquier condición médica que pudiera afectar al feto en crecimiento, durante la etapa temprana del embarazo.
Exámenes adicionales y evaluaciones del feto utilizando ultrasonido y ecocardiograma, seguirán en el segundo trimestre si es necesario. Una vez que nazca el bebé, se realizan más pruebas incluyendo un exámen mandatorio para detectar 45 enfermedades congénitas que no pueden ser detectadas por los médicos. Estas enfermeades incluyen VIH, problemas de audición y tiroides, y otros trastornos metabólicos congénitos que se diagnostican en los laboratorios estatales en Albany. Los resultados están generalmente disponibles en 10 días.
Pero para que los avances médicos y tecnológicos descritos en este artículo funcionen adecuádamente, los padres deben hablar con sus médicos e identificar los defectos de nacimiento reales o potenciales, antes de que sea demasiado tarde. El Hospital Lincoln tiene un excepcional equipo de cuidado prenatal, inter e intra-parto, y postnatal, que está disponible para apoyar a los bebés y las familias.
Para obtener más información sobre consejería pre-embarazo y los servicios de atención prenatal en el Hospital Lincoln y otras instalaciones de HHC en toda la ciudad, visita www.nychhc.org o llama al 311.
Dr. B. K. Rajegowda, MD, es Director de Servicios de Neonatología en el Hospital Lincoln y Profesor de Pediatría Clínica en la Universidad de Cornell.