FIT for design
En forma para diseñar

FIT for design
Story by Robin Elisabeth Kilmer

Thaiana Cruz decided she wanted to design clothes when, as a kid, she would put on fashion shows with her older sister.
“Those were the greatest times,” she said.
The two would plunder their mother’s wardrobe, and an audience of friends would determine who was best dressed.
The faux-fashion shows, which started when Cruz was as young as 4, played out to everyone’s delight – except her mother’s.
“Oh, God. We got in a lot of trouble,” recalled Cruz.
These adventures, however, culminated years later in accolades from the Fashion Institute of Technology (FIT), from which Cruz graduated this May, winning Critic’s Pick for children’s wear in the annual Future of Fashion show put on by the school.
Cruz, who won a full scholarship to study at FIT, got her associate’s degree in women’s wear, and her bachelor’s degree in children’s wear.
But the designer, who lives in the Fordham section of the Bronx, was humble about her victory.
“I was really shocked, because in my class there are so many talented people. We all worked really hard.”
Cruz’s outfit, worn by a four-year-old model, featured a black cape, complete with leatherwork, Swarovski crystals and a painted design placed onto the interior of the cape, which is visible when the wearer is caught in a gust of wind—or in a flying fantasy, in which such a cloak mimics the flapping of wings.
The outfit, and Cruz’s bent for design, is something of a family affair.
Cruz’s father, a graphic designer, helped design the logo design for the outfit, and for Cruz’s future line of clothing.
Beyond that collaboration, the budding designer credits her family with inspiring her work, and encouraging her to work in a creative field.

“I come from a family of artists,” she explained. “So it was expected.”
In addition to her father, Cruz’s brother is also a graphic designer; her sister is an interior designer; and her mother and grandparents were tailors.
When the family moved to the Bronx from the Dominican Republic and discovered Halloween, Cruz, then 7, decided she wanted to dress as Jasmine from Disney’s Aladdin.
Rather than get a store-bought costume, it was Cruz’s mother who sewed the outfit.
Inspired by her mom’s example, Cruz took up sewing as a youngster and even made her own prom dress.
Her mother’s jewelry has also left a mark: Cruz still loves to wear the chunky jewelry of the eighties that she and her sister often delighted in wearing during their fashion shows.
The bold jewelry is concurrent with the type of clothes Cruz wants to create for kids.
“I want them to have statement pieces,” she said.
Her work at FIT has drawn rave reviews from her professors.
“I’m excited for Thaiana and looking forward to seeing what she will do
with her talents,” said Barbara Seggio, Adjunct Associate Professor, who served as her professor for the past year and a half.
“During that time, I watched her hone her unique design aesthetic. She is a natural designer,” she added. “I am very proud of her, and I believe she is destined to do great things.”
One of those great things already completed was the winning cape.
It was inspired, noted Cruz, by what she had observed from Chanel runway pieces, in which she’d noticed emphasis being placed on the shoulder.
“I decided to concentrate on (that) one part of the body.”
The cape, as Cruz designed it, draws attention to the shoulders with a line of crystals, and pointed paneling.
It would certainly be the article of clothing a gaggle of sisters would argue about during a game of dress-up.
But it is also a wearable piece, one a lucky kid might sport for everyday use.
“I love to see a kid with personality,” smiles Cruz. “That’s who I’m thinking about when I design clothes.”
She would certainly know a thing or two about a kid with personality.
For more on Cruz and her designs, please visit www.thaianacruz.com.
En forma para diseñar
Historia por Robin Elisabeth Kilmer

Thaiana Cruz decidió que ella deseaba diseñar ropas cuando, siendo una niña, presentaba ‘shows’ de modas con su hermana mayor.
“Esos fueron los mejores tiempos”, dijo ella.
Las dos saqueaban el ropero de su madre, y una audiencia de amistades determinaba quién estaba mejor vestida.
Los shows de moda de imitación que se celebraban comenzaron cuando eran para deleite de todos, excepto su madre.
“Oh Dios. Nos metimos en muchos problemas”, recuerda Cruz.
Sin embargo, años después, estas aventuras fueron elogiadas por el Fashion Institute of Technology (FIT), de donde Cruz se graduó este mes de mayo, logrando Critic’s Pick para vestuario infantil en el Future
Fashion Show presentado cada año por la escuela.
Cruz, quien ganó una beca completa para estudiar en FIT, recibió su diplomado en ropa de mujer, y su licenciatura en ropa de niños.
La residente del Bronx, se sintió humilde ante su victoria.
“Yo estaba realmente sorprendida, porque en mi clase había tanta gente talentosa. Todos trabajamos muy duro”.
El atuendo de Cruz, vestido por una modelo de cuatro años de edad, presentaba una capa negra, completa con obra de piel, cristales de Swarovski y un diseño pintado en el interior de la capa, el cual es visible cuando el que lo lleva se enfrenta a una ventisca-o en una fantasía en vuelo, en la cual esta capa habrá ciertamente de facilitar la simulación de alas que revolotean.
El atuendo era algo así como un asunto de familia. El padre de Cruz, diseñador gráfico, ayudó a diseñar el logo para el atuendo y para la futura línea de ropa de Cruz.
Además de esa colaboración, la incipiente diseñadora da crédito a su familia por inspirarle en su obra, y estimulando su trabajo en el área creativa.

“Yo vengo de una familia de artistas, por tanto era de esperarse”.
El padre y el hermano de Cruz ambos son diseñadores gráficos; su hermana es diseñadora de interiores; y su madre y abuelos fueron sastres.
Cuando la familia se mudó al Bronx desde la República Dominicana y descubrieron a Halloween, Cruz, entonces con 7 años de edad, decidió que ella quería vestirse como Jasmine del Aladino de Disney.
En lugar de adquirir un disfraz de la tienda, fue la madre de Cruz quien le confeccionó el atuendo. Inspirada por el ejemplo de su madre, Cruz comenzó a coser cuando jovencita y hasta confeccionó su traje de fiesta de graduación.
Las joyas de su madre también dejaron una huella: A Cruz todavía le encanta usar las joyas gruesas y pesadas de la década de los ochenta, que tanto ella como su hermana con frecuencia se deleitaban en lucir durante sus espectáculos de modas.
La joyería atrevida es concurrente con el tipo de ropas que Cruz desea crear para los chicos.
“Yo deseo que ellos tengan piezas que hagan impacto”, dijo ella.
Su trabajo en FIT le ha ganado el apoyo de sus profesores.
“Estoy entusiasmada por ella y por lo que ella hará en el futuro con su talento,” dijo
Barbara Seggio, Profesora Asociada, quien fue profesora de Cruz por un ano y medio.
“Durante ese tiempo, vi como ella desarrollo su estética única. Es una diseñadora natural. Estoy muy orgullosa de ella, y pienso que ella hará cosas grandes.”
La capa diseñada por Cruz estuvo inspirada por lo que ella ha observado de piezas de Chanel en la pasarela, donde ella ha notado un énfasis en el hombro.
“Yo decidí concentrarme en (esa) parte del cuerpo”.
La capa, tal como fue diseñada por Cruz, atrae la atención sobre los hombros con una línea de cristales, y un panel puntiagudo.
Este ciertamente sería el artículo de vestimenta sobre el cual una manada de hermanas argumentaría en un juego de acicalarse.
Pero la pieza puede también usarse, un afortunado chico puede lucirla todos los días.
“Me encantaría ver a un chico con personalidad vestirla”, dijo Cruz. “Sobre eso es que yo pienso cuando diseño las ropas”.
Ella sabrá una o dos cosas sobre un chico con personalidad.
Para conocer más sobre Cruz y sus diseños, favor de visitar www.thaianacruz.com.